Comprendí que el amor muere o mata,
que los besos se cansan de susurrar amor,
las manos de anhelar deseos,
comprendí que las palabras se pierden en el sinsentido.
El amor hiere,
hiere a muchos a la vez,
Te maté,
me mataste,
RIP.
No hay besos, ni caricias, ni palabras,
quedó la nada que todo lo ocupa,
Y en mi cabeza mil historias,
que se agolpan en mi alma y llora.
La soledad abriga,
se convierte en mi bella amiga.
La soledad comprende,
pues finalmente ella no miente.
Sola,
dolida,
restos,
yo,
en fin Berta.